Una reflexión sobre la identidad. Una continua búsqueda de lo no visto, lo cerrado, lo recóndito, los sueños. Una lucha contra la opresión, el ocaso. Crear con intensidad y verdad para desvelar un mundo interior individual cuyo final es diluirse en el entorno. Entre la variedad de materiales que Teresa MATAS utiliza para el desarrollo de su trabajo artístico se encuentra el textil, que, junto con la tijera, hilo, aguja, papel y pintura, libran sobre su mesa de trabajo una batalla sin límite. Con la performance utiliza su cuerpo como instrumento y material para la producción de arte ejecutando obsesiva y dolorosamente las acciones de transportar, acumular, vaciar, martillear.
Matas empieza el siglo XXI con una instalación en la Fundación Pilar y Joan Miró, Número 55 bajos, inspirada en el mito de la caverna de Platón. Convierte la gruta en la habitación de una casa y reduce los personajes de la parábola a la figura de una mujer que padece encierro doméstico. El impacto que le causaron los diarios de Alejandra Pizarnik hizo que le rindiera homenaje en una sala del Kunstmuseum de Bonn (2003) uniendo objetos de su creación colgados en la pared con fragmentos de su poesía. Revisa quince años de su trabajo (1991-2006) en la retrospectiva Abriendo, cerrando, cerrando abriendo en la Planta Noble del Casal Solleric (Palma de Mallorca). A lo largo del recorrido de las diez habitaciones que componen este espacio, va escribiendo en las paredes, en las telas, en el suelo. Espacios para la reflexión. Conminaciones. En la exposición In-Flux (2008), en el barrio londinense de Brick Lane, dispone innumerables recipientes de barro e incita al espectador a vaciarse. Al año siguiente, In-Flux se expone en Escocia en el Summerlee Museum. Para este nuevo espacio utiliza seis vestidos/escultura colgados del techo y una jaima construida con varias de sus telas, de tal modo que consigue que el frío entorno industrial quede totalmente arropado. En el Centro de Documentación y Museo Textil de Terrassa (Cataluña), con el proyecto Zurcir el alma (2010), tiene la oportunidad de mostrar una buena selección de su escultura textil. Construye un jardín cercado en Galería Lluc Fluxà (Palma de Mallorca), El Jardín (2011), y en la Galería Louis 21 (Palma de Mallorca), con Scissors (2012), una contundente muestra con todos sus recursos artísticos.
“Después del fallecimiento de mi hijo a consecuencia de un accidente de tráfico viví un estado indescriptible. Encerrada en mi estudio intento crear grafías que me permitan revivir una y otra vez el instante fatal del impacto, para sentir que estaba a su lado, para protegerle y acompañarle en el definitivo tránsito. Atenazada por la angustia, una noche salgo a fotografiar automóviles en movimiento. En un cruce de caminos me posiciono de tal forma que puedo captar el momento en que los coches vienen hacia mí y me deslumbran hasta que en mi retina no queda nada más que una luz blanca. Reúno una colección de fotos sobre las que, una vez ampliadas, empiezo a dibujar con lápiz y rotulador blanco. Me dejo llevar construyendo noches estrelladas. Una selección de estas fotos aparece publicada en la revista de arte ESOPUS:22, editada en Nueva York (2015).”
Al abordar su obra para el proyecto RE-ACTION, ¿Y si nos vestimos de rojo?, su lucha culminó con una victoria al ofrecerle la oportunidad de trasladar al campo de batalla gran parte de las armas que posee.
Teresa Matas vive y trabaja en Mallorca.
Matas empieza el siglo XXI con una instalación en la Fundación Pilar y Joan Miró, Número 55 bajos, inspirada en el mito de la caverna de Platón. Convierte la gruta en la habitación de una casa y reduce los personajes de la parábola a la figura de una mujer que padece encierro doméstico. El impacto que le causaron los diarios de Alejandra Pizarnik hizo que le rindiera homenaje en una sala del Kunstmuseum de Bonn (2003) uniendo objetos de su creación colgados en la pared con fragmentos de su poesía. Revisa quince años de su trabajo (1991-2006) en la retrospectiva Abriendo, cerrando, cerrando abriendo en la Planta Noble del Casal Solleric (Palma de Mallorca). A lo largo del recorrido de las diez habitaciones que componen este espacio, va escribiendo en las paredes, en las telas, en el suelo. Espacios para la reflexión. Conminaciones. En la exposición In-Flux (2008), en el barrio londinense de Brick Lane, dispone innumerables recipientes de barro e incita al espectador a vaciarse. Al año siguiente, In-Flux se expone en Escocia en el Summerlee Museum. Para este nuevo espacio utiliza seis vestidos/escultura colgados del techo y una jaima construida con varias de sus telas, de tal modo que consigue que el frío entorno industrial quede totalmente arropado. En el Centro de Documentación y Museo Textil de Terrassa (Cataluña), con el proyecto Zurcir el alma (2010), tiene la oportunidad de mostrar una buena selección de su escultura textil. Construye un jardín cercado en Galería Lluc Fluxà (Palma de Mallorca), El Jardín (2011), y en la Galería Louis 21 (Palma de Mallorca), con Scissors (2012), una contundente muestra con todos sus recursos artísticos.
“Después del fallecimiento de mi hijo a consecuencia de un accidente de tráfico viví un estado indescriptible. Encerrada en mi estudio intento crear grafías que me permitan revivir una y otra vez el instante fatal del impacto, para sentir que estaba a su lado, para protegerle y acompañarle en el definitivo tránsito. Atenazada por la angustia, una noche salgo a fotografiar automóviles en movimiento. En un cruce de caminos me posiciono de tal forma que puedo captar el momento en que los coches vienen hacia mí y me deslumbran hasta que en mi retina no queda nada más que una luz blanca. Reúno una colección de fotos sobre las que, una vez ampliadas, empiezo a dibujar con lápiz y rotulador blanco. Me dejo llevar construyendo noches estrelladas. Una selección de estas fotos aparece publicada en la revista de arte ESOPUS:22, editada en Nueva York (2015).”
Al abordar su obra para el proyecto RE-ACTION, ¿Y si nos vestimos de rojo?, su lucha culminó con una victoria al ofrecerle la oportunidad de trasladar al campo de batalla gran parte de las armas que posee.
Teresa Matas vive y trabaja en Mallorca.